La papaya es un fruto del papayo, árbol que crece en zonas tropicales y sub tropicales. Es una fruta de sabor dulce con algunas propiedades medicinales que te puede ayudar en varios problemas de salud y enfermedades.
Las propiedades curativas de la papaya son útiles para ayudar a personas que padecen de ictericia, colitis, diabetes y asma, entre otras. También es buena para aliviar todo tipo de irritaciones de la piel y quemaduras originadas por al exposición al Sol.
Fundamentalmente se utiliza la papaya por sus efectos diuréticos, laxantes y para expulsar parásitos intestinales. Sus flores son buenas para la tos, bronquitis y catarros pulmonares.
Gracias a su efecto laxante es indicada para quienes sufren de estreñimiento, a la vez que favorece la cicatrización interna de úlceras gástricas. También ayuda a eliminar las amebas, especie de parasito intestinal que en muchos casos son responsables de la aparición de diarrea crónica. En este caso es en las semillas donde se encuentran las propiedades anti parasitarias.
Los nutrientes que la papaya nos brinda son ideales para facilitar la digestión y para calmar el dolor y la inflamación del estómago. Favorece el proceso digestivo por lo que es muy recomendable consumir papaya después de una comida pesada o abundante.
Es muy útil en casos de gastroenteritis, colitis y colon irritable gracias a su efecto suavizante y antiséptico en los intestinos. Además, es una fruta ideal para quienes hacen dieta, tiene un bajo valor calórico y aporta numerosos nutrientes esenciales al organismo.
También actúa fortaleciendo el sistema inmune ya que aporta una buena dosis de vitamina C. Para obtener todo el poder medicinal de la papaya, evita los frutos que estén demasiado maduros, pues estos se ven disminuidos en cuanto a sus componentes y no son tan efectivos. Las mejores papayas son las de menor tamaño y las que más color tienen.