LOS 7 PROBLEMAS DE USAR LA ROPA AJUSTADA
1- Afecta la circulación de la sangre:
Esta práctica puede dificultar que la sangre circule, provocando que pase mucho tiempo en las extremidades inferiores. Esa presión en las piernas y la zona abdominal puede ser peligrosa, ya que puede generar hinchazón, entre otras cosas.
2- Mala digestión:
Los pantalones y cinturones ajustados pueden dificultar el proceso de la digestión. Luego de comer tu estómago se dilata, y la presión en esta zona puede provocar que ciertos ácidos del estómago fluyan hacia el estómago causándote acidez y reflujo.
3- Dolores de espalda:
Vestir pantalones y camisetas ajustadas puede evitar que tu cuerpo se relaje y como consecuencia, provocarte dolores de espalda. Si no lo cree, haz la prueba y usa ropa holgada por un par de días. Notarás la diferencia. Y es que cuando vistes prendas apretadas, los músculos se sobrecargan, ocasionando que tus vértebras se esfuercen más de la cuenta. Además, al tener caderas comprimidas tu columna pierde soporte.
4- Enfermedades en los genitales:
La humedad y altas temperaturas ocasionadas por la ropa apretada en la zona genital, puede favorecer el desarrollo de hongos y bacterias. pero este riesgo no es sólo para las mujeres, a los hombres les puede provocar alteraciones en la cantidad y calidad de espermatozoides e incluso causar dolor en los testículos.
5- Várices:
Usar ropa apretada puede facilitar la aparición de várices en las piernas, por la presión que se ejerce.
6- Celulitis:
Si bien la ropa apretada en sí no es la causante de la celulitis, retrasa los efectos positivos de un tratamiento para combatirla y por ende, favorece su aparición, haciendo que una celulitis grado 1 -por ejemplo- evolucione a grado 2.
7- Problemas de respiración:
Las prendas muy ceñidas, además pueden obstruir el paso del oxígeno por el cuerpo. Por ejemplo, puede hacer que tu respiración llegue sólo a la parte alta del tórax. De este modo, los intercambios de gases no se concretan eficientemente y tu organismo comienza a acumular más gas carbónico, el cual acelera la oxidación de las células y favorece su envejecimiento.
Esta práctica puede dificultar que la sangre circule, provocando que pase mucho tiempo en las extremidades inferiores. Esa presión en las piernas y la zona abdominal puede ser peligrosa, ya que puede generar hinchazón, entre otras cosas.
2- Mala digestión:
Los pantalones y cinturones ajustados pueden dificultar el proceso de la digestión. Luego de comer tu estómago se dilata, y la presión en esta zona puede provocar que ciertos ácidos del estómago fluyan hacia el estómago causándote acidez y reflujo.
3- Dolores de espalda:
Vestir pantalones y camisetas ajustadas puede evitar que tu cuerpo se relaje y como consecuencia, provocarte dolores de espalda. Si no lo cree, haz la prueba y usa ropa holgada por un par de días. Notarás la diferencia. Y es que cuando vistes prendas apretadas, los músculos se sobrecargan, ocasionando que tus vértebras se esfuercen más de la cuenta. Además, al tener caderas comprimidas tu columna pierde soporte.
4- Enfermedades en los genitales:
La humedad y altas temperaturas ocasionadas por la ropa apretada en la zona genital, puede favorecer el desarrollo de hongos y bacterias. pero este riesgo no es sólo para las mujeres, a los hombres les puede provocar alteraciones en la cantidad y calidad de espermatozoides e incluso causar dolor en los testículos.
5- Várices:
Usar ropa apretada puede facilitar la aparición de várices en las piernas, por la presión que se ejerce.
6- Celulitis:
Si bien la ropa apretada en sí no es la causante de la celulitis, retrasa los efectos positivos de un tratamiento para combatirla y por ende, favorece su aparición, haciendo que una celulitis grado 1 -por ejemplo- evolucione a grado 2.
7- Problemas de respiración:
Las prendas muy ceñidas, además pueden obstruir el paso del oxígeno por el cuerpo. Por ejemplo, puede hacer que tu respiración llegue sólo a la parte alta del tórax. De este modo, los intercambios de gases no se concretan eficientemente y tu organismo comienza a acumular más gas carbónico, el cual acelera la oxidación de las células y favorece su envejecimiento.
